La Casa de América Latina participó en el Día de las velitas en la Embajada de Colombia en Moscú.

En 1854, el Papa Pío IX reconoció como dogma la Inmaculada concepción de la Virgen María. Según este dogma, la Virgen fue concebida de padres ordinarios, pero al mismo tiempo no heredó el pecado original. A la espera de esta decisión, los católicos en muchos países del mundo, incluido Colombia, encendieron velas y linternas de papel para demostrar su fe en la Inmaculada concepción de la Virgen. El dogma fue aceptado y la tradición se mantuvo.

Esta noche, las familias se reúnen y encienden luces, velas y linternas, expresando así el respeto a la Virgen María y pidiendo bendiciones para cada miembro de la familia.

En el mismo ambiente cálido, casi familiar, se celebró la fiesta de ayer. Los invitados de la Embajada de Colombia aprendieron más sobre la tradición colombiana, así como sobre la riqueza cultural y gastronómica del país. La velada estuvo llena de baile y música, todos los presentes disfrutaron de platos de la cocina nacional: mantecadas, tamales y buñuelos navideños con natillas tiernas y cremosas; así como bebidas dulces, se pudo degustar aguapanela y canelazo, un delicioso chocolate caliente.